Tras una revisión a la nómina se detectó que la administración pasada simuló una contratación de cien personas, es decir, “supuestamente fueron empleados en enero por tiempo determinado, pero entraron en funciones en otra fecha y los expedientes están incompletos”, informó la alcaldesa María Guadalupe Ortiz Robles.
Explicó que la situación ya se notificó al Órgano Interno de Control (OIC) Municipal y “se hace lo necesario para evitar una afectación legal a las finanzas del ayuntamiento con demandas laborales”.
Por lo anterior, indicó que ya se negoció con 60 personas para rescindir contratos, “en los que se cuidó cada detalle ante las autoridades competentes, para no generar más cargas a la entidad administrativa”.
Refirió que ocho funcionarios interpusieron una demanda, en la que exigían un incremento salarial. “Se revisó dicha situación y tendrán su aumento sin problema, pues no se les había otorgado debido a la falta de información en sus expedientes”, lo cual responsabilizó a la administración anterior.
En lo que respecta a las quejas de cambios de área y baja de salario sin justificación, la presidenta municipal informó que “este hecho no fue tal, sino que fue parte de la revisión de la nómina debido a que se encontraron inconsistencias en los expedientes de varios trabajadores.
“Se necesitaba la documentación completa para tomar decisiones respecto a su relación laboral con el ayuntamiento, pero no hubo nada anómalo, pues lo que se busca es no afectar las arcas municipales con demandas laborales”, insistió.